Jan Orfila, la perla de la cantera azul que llegó a debutar en ACB

La temporada 2021/2022 parece haber sido la última de Jan Orfila Sternal en las canchas de básquet, a sus 36 años, el pívot de 2.07 de Sant Lluís, que ha llegado a debutar en ACB, abandona la práctica activa del deporte de la canasta.

Orfila se inició en el baloncesto en Ses Canaletes, en el club de su pueblo, el CCE Sant Lluis, su altura y aptitudes muy pronto le sirvieron para ser reclutado por el Centre de Tencnificació de les Illes Balears, fue en esta etapa cuando llegó a ser internacional con la Selección Española Cadete y Junior.

Su siguiente paso fue el salto al CB Granada, era la temporada 2004/2005, en la ciudad andaluza alternaba su presencia en el equipo EBA con su participación en los entrenos del equipo ACB con el que llegó a debutar en competición oficial.

En la temporada 2007/2008 fue cedido al Básquet Inca de la LEB ORO, en Mallorca iniciaría su periplo por la segunda categoría del baloncesto español, Básquet Mallorca, UB La Palma y Peñas Huesca serían sus siguientes paradas antes de iniciar su aventura francesa en el Stade Montois de la cuarta división gala, tras la cual dejaría el baloncesto profesional para regresar a la isla de la mano del club que lo vio nacer, el CCE Sant Lluís.

Era la temporada 2016/2017, coincidiendo con el enorme crecimiento del equipo de Ses Canaletes, que le había llevado a militar en la categoría EBA, se estaba gestando el Básquet Menorca y Orfila fue partícipe del título en EBA y ascenso a la LEB Plata, con un Básquet Menorca ya emancipado de la entidad de Ses Canaletes. Una temporada más militaría en el equipo de la tercera división estatal, consiguiendo el objetivo de la permanencia.

Fue entonces cuando volvió a cambiar de aires, bajando una categoría y fichando por el CB Es Castell, en el club que preside Tomeu Vanrell volvió a mostrar su poderío en la pintura, siendo un jugador fundamental en las permanencias conseguidas por la entidad del equipo del levante menorquín.

Ahora, a sus 36 años, todo apunta a que la carrera baloncestística del pívot lluïsser ha llegado a su fin, y lo hace con un bagaje enorme y con una etiqueta que, de momento, nadie parece que se la vaya a quitar a corto plazo, la de mejor jugador que haya dado el deporte de la canasta en Sant Lluís.

Fotos: deportesmenorca.com / menorcaaldia.com