La primera parte condena al Sant Lluís a una derrota abultada ante el líder

Ficha Técnica

CCE Sant Lluís 44 (6-6-19-13): Michael González 6, Marc Cardona, Sergi Airós 3, Martí Segura 2, Ernesto Fernández 2, Marcel Sanjurjo, Martí Reyes, Mario Seguí 5, Francesc Sangil 11 y Simon Jarillo 15.

6/22 en tiros libres, 16/47 en tiros de dos y 2/6 en triples. 16 faltas personales, eliminado por cinco faltas Sergi Airós.

CD Alcázar 100 (22-32-20-26): Joel Fanals 5, Joan Saura 16, Adrià Llabrés 22, Biel Camps 14, Joaquim Reinés 17, Andrés Medrano 2, Pol Gomila 7, Xavier Enseñat 3, Jaume Morlà 8 y Pau Seguí 6.

11/19 en tiros libres, 28/48 en tiros de dos y 11/34 en triples. 18 faltas personales, sin eliminados.

Árbitros: Martí Seguí Andreu y Pau Vinent Petrus.

Oficiales de Mesa: María Jesús Ainsa y Paula Ferri.

El equipo Junior masculino recibía al líder, CD Alcázar, en Ses Canaletes y eran conscientes de que el partido podía ser duro y difícil, quizás se tuvo “demasiado respeto” a la condición de teórico rival superior y eso condicionó el juego en una primera mitad que condenó al CCE Sant Lluís a una derrota abultada. La mejoría y el desparpajo de los azules llegó en una segunda mitad en la que si plantó una digna réplica. Simón Jarillo, con 15 puntos, fue el máximo anotador azul.

Los rojillos plantearon una presión a toda pista desde el inicio del partido, una presión de la que el equipo lluïsser, paradójicamente, supo salir con relativa comodidad, pero cuando llegaba a campo de ataque se amilanaba, los tiros no entraban y el Alcázar, punto a punto, triple a triple, fue poniendo tierra de por medio, 0-13 de salida, 6-22 al finalizar el primer acto.

Los nerivos en ataque continuaron en el segundo acto y los mahoneses sacaban petróleo de ello, sabiendo en cada momento a que jugar, a dar un pase más y a encontrar la opción más cómoda para anotar, mientras el Sant Lluís seguía enfrascado con errores en tiros fáciles. La distancia llegó hasta los 42 puntos al descanso, 12-54.

Tras el paso por los vestuarios apareció otro Sant Lluís, olvidó el marcador, dejó de tener miedo al rival y empezó a ver aro con cierta facilidad, dando como resultado un tercer acto competido, Simón Jarillo y Francesc Sangil anotaban en el interior y los triples de Michael González hacían el resto para conseguir un digno 19-20.

Los diez minutos finales fueron visitantes otra vez, 13-26, pero con un Sant Lluís mostrando otra cara, esa con la que se debe quedar de cara a futuros partidos, tanto de esta primera fase, como de la segunda.